Tratamiento de residuos peligrosos en la industria del cannabis

La empresa CanMe San Juan lleva adelante un protocolo de seguridad que responde a las normativas sobre el tratamiento de residuos peligrosos en cualquier actividad productiva de índole biológico.

El tratamiento de los residuos peligrosos en la industria del cannabis se debe abordar con el mismo rigor y responsabilidad que en cualquier otra industria que genere algún tipo de residuos. Los residuos peligrosos son aquellos que presentan características de toxicidad, inflamabilidad, reactividad o corrosividad y deben ser manejados adecuadamente para evitar daños a la salud humana y al medio ambiente.

Entre las prácticas comunes para el tratamiento de residuos peligrosos en esta actividad productiva se encuentran su correcta identificación y clasificación, entonces, es vital saber reconocer y clasificar correctamente los desechos generados en el proceso de cultivo, producción y elaboración del cannabis para determinar si son peligrosos o no. A continuación, estos deben ser separados adecuadamente de otros no peligrosos para evitar la contaminación cruzada y facilitar su correcto manejo posterior. Desde CanMe San Juan se trabaja con la extracción del THC de las flores a partir de un destilado de agua y alcohol. A partir de ello, el residuo sólido se elimina como categoría de peligroso y el solvente se incluye en la categoría Y6, esto es, desechos resultantes de la producción, la preparación y la utilización de disolventes orgánicos.

Asimismo, un almacenamiento seguro hasta el retiro definitivo de los residuos es un requisito ineludible. A partir de ello, son almacenados en contenedores preparados y debidamente etiquetados para evitar derrames y garantizar un manejo seguro hasta su retiro a las plantas de tratamiento.

Respecto a su tratamiento y eliminación, los desechos pueden ser tratados mediante diversas técnicas, como la neutralización, la incineración o la estabilización química, dependiendo del tipo de residuo y su peligrosidad. Para este paso, la Empresa requiere los servicios de Tecma, una entidad sanjuanina especializada y que responde a las normativas y estándares de seguridad nacionales vigentes.

En Argentina, la legislación ambiental y de gestión de residuos peligrosos se basa en diversas leyes y decretos que tienen como objetivo proteger el Medio Ambiente y la Salud Pública. Una de ellas es la Ley N° 25.675 General del Ambiente, que establece los principios y normas básicas para la protección, preservación y mejora del ambiente y sus recursos naturales. También regula la gestión de residuos peligrosos y establece responsabilidades para su manejo seguro. Además, se complementa con la Ley Nacional N° 24.051 de Residuos Peligrosos, que define a qué se refiere cuando se habla de ello, sus características y su manejo; establece las obligaciones y responsabilidades de los generadores, transportistas y operadores de tratamiento y disposición final de residuos peligrosos. En materia de legislación internacional, Argentina es signataria del Convenio de Basilea, un acuerdo global que regula el movimiento transfronterizo de residuos peligrosos y su eliminación.

La industria del cannabis tiene potencial en materia de sostenibilidad, dada las características biológicas propias de estas plantas, conocida por su capacidad para absorber dióxido de carbono del ambiente, la oportunidad fabricación de bioplásticos a partir de la fibra del cáñamo y la fabricación de sustratos o biochars a partir de las hojas, raíces y tallos. Por ello, es fundamental acompañar estos beneficios con prácticas responsables sobre el tratamiento de los residuos, con el objetivo de mantener la sostenibilidad ambiental, minimizar el impacto negativo y proteger la salud de todos los ciudadanos.