Cannabis y cáñamo: Se consolida una nueva industria en la Argentina

La nueva ley sobre el marco regulatorio de la cadena del cannabis medicinal y el cáñamo industrial significa un importante avance para la provisión de medicamentos a base de cannabis y la apertura de un gran flujo de inversión que generará divisas y puestos de trabajo en todo el territorio nacional.

El pasado jueves 5 de mayo, la Honorable Cámara de Diputados de la Nación convirtió en ley el proyecto que establece el marco regulatorio para la inversión pública y privada en toda la cadena del cannabis medicinal y cáñamo Industrial. La iniciativa tuvo 155 votos a favor, 56 en contra, en tanto que registró 19 abstenciones; con 25 ausentes.

Entre las exposiciones de los miembros informantes de la comisión de salud, se destaca Mara Brawer, diputada por el Frente de Todos, que resaltó las ventajas de la Argentina: “…tenemos las tierras, los climas, el conocimiento científico-tecnológico, la inversión de emprendedores que apuestan a esto y la enorme posibilidad de ser la punta de lanza de una industria pujante que va a permitir el ingreso de divisas y muchas otras ventajas.”

Por su parte, el diputado Ricardo Buryaile, del Bloque Unión Cívica Radical, instó a la sociedad a no sentir miedo, ya que “aprobar esta ley no es una carta blanca para el consumo, ni para el narcotráfico; habla sobre cannabis medicinal, no uso recreativo. Se legaliza la producción de lo que hoy se hace bajo cuerda, la que hacen miles y miles de mamás para sus hijos.” Y concluyó sus argumentos brindando una experiencia personal, “mi hijo consumió cannabis medicinal porque tiene de espasticidad, problemas terapéuticos, y espero que pueda hacerlo con mucha más calidad, controlado por el ANMAT, como corresponde”.

Siguiendo esta línea, la diputada por el Frente de Todos, Carolina Gaillard, remarcó que «esta ley garantiza que las familias puedan acceder a un producto seguro y de calidad; viene a complementar la ley 27.350, del uso medicinal del cannabis. Es así porque hasta ahora sólo se permitían los cultivos con fines de investigación, pero no regulaba integralmente el proceso productivo. “Las familias seguían preguntando dónde conseguir el aceite. También, las provincias que han avanzado y pidieron autorización para proyectos de investigación con INTA y CONICET estaban restringidas a ceñirse a esa reglamentación”. A partir de esta nueva ley, a estas mismas provincias, entre las que se encuentra San Juan, se les abre el camino para avanzar en todos los aspectos que contempla el proceso productivo, incluida la elaboración y comercialización de productos derivados del cannabis con fines medicinales y/o terapéuticos.

Asimismo, la Dip. Silvana Ginocchio, del Bloque Frente de Todos, celebró el tratamiento de proyectos trascendentes y que revisten un cambio de paradigma. “Este marco regulatorio que autoriza etapas de siembra, cosecha, producción, almacenamiento, transporte, comercialización, exportación y posesión de semillas del cannabis y del cáñamo industrial es un paso hacia el futuro, en función de que estamos fomentando proyectos de inversión pública, privada o mixta”, sintetizó.

Puntos centrales de la nueva Ley:

  • Se promueven mecanismos de autorizaciones para los productores y comercializadores, y estrategias de seguridad, fiscalización y trazabilidad en la cadena.
  • Se da el marco regulatorio para la inversión pública y privada en toda la cadena del cannabis medicinal y complementar la actual legislación, la Ley 27.350, que autoriza el uso terapéutico y paliativo del cannabis.
  • Se legalizan los eslabones productivos, de comercialización y subproductos de la actividad del cáñamo industrial.
  • Se creará una agencia reguladora que oficiará como órgano rector y articulador de la cadena productiva del cannabis y tendrá a su cargo las instancias de regulación involucradas. Esta será la nueva Agencia Regulatoria de la Industria del Cáñamo y del Cannabis Medicinal (Ariccame).
  • La Ariccame tendrá autarquía técnica, funcional y financiera y orbitará en el ámbito del Ministerio de Desarrollo Productivo. Establecerá los requisitos y antecedentes para solicitar las licencias de producción de cannabis medicinal o cáñamo industrial, y buscará» maximizar los controles destinados a prevenir actividades ilegales, incluyendo el lavado de activos».
  • Se estima que el cannabis será otro «commodity» de los que exporta la Argentina, tal como ocurre con los granos o la carne.
  • Se persigue el “desbaratamiento del mercado informal de aceites y otras preparaciones herbarias irregulares que existe en la actualidad, y terminar con la proliferación de productos que carecen de cualquier tipo de control respecto de su composición y calidad».